martes, 21 de febrero de 2023

La nostalgia de lo no vivido.


En aquella parcela de viento

en la que sembrábamos silencio,

una mañana, 

después del trabajo,

un rayo de deseo inesperado

llenó con su fogonazo

nuestras manos cansadas.


Cosechas de bosque y montañas

sirvieron de refugio  a aquellas plantas

que nadie había sembrado,

y cuya existencia nadie ha reconocido.


La nostalgia de lo negado,

de lo no mirado,

de lo que no ha pasado,

de lo que nadie ha dicho.


La nostalgia de los cuerpos

que no se conocen

y que aún ignoran

el rayo de deseo

que aquella mañana de invierno,

por unos instantes,

hechizo sus sentidos.


la negación de lo prohibido,

que tanto une como separa

tus deseos de los míos.